lunes, 20 de agosto de 2012

BDSM;


Pues mi primer escrito decidí que sea informativo, sobre esta parte de mí que me ha abierto muchas experiencias, me ha ayudado a conocerme más, me ha dado placer y sobre todo aprendizaje. Me ha ayudado a liberarme, a expresar mis gustos sin miedo y me ha dado a entender que son normales, esta libertad recién descubierta que equivale a felicidad. Todo esto gracias al BDSM. Este escrito contiene mi opinión personal, como todos no dispongo de la verdad absoluta, esto solo es lo que más se acerca a mi punto de vista, así que las percepciones pueden cambiar dependiendo de cada quien, sobre todo en un mundo tan amplio como lo es el BDSM.

Este se lo dedico especialmente a aquellos curiosos que desean experimentar más, que sienten que la sexualidad expresada comúnmente como se suele hacer, no es suficiente.
Entonces, primero que nada hay que saber:


¿Qué es el BDSM?

Primero que nada vamos a empezar por definir las siglas.
B: Bondage. Refiriéndose a la inmovilización total o parcial del individuo sumiso por parte del Dominante. Puede ser con esposas, cadenas, correas, ataduras con telas, ropa interior, corbatas y cuerdas, si se es más elaborado y artístico puede ser llamado Shibari.
D: Dominación. Se refiere al poder que puede tener una persona sobre otra que se lo permite.
S: Sumisión. Se refiere a la entrega de poder y respeto de una persona sumisa, esto es voluntario.
    Sadismo. Se refiere al disfrute que puede tener una persona causándole dolor o humillación a la persona sumisa, siempre bajo mutuo acuerdo.
M: Masoquismo. Se refiere al disfrute que puede tener la persona al ser expuesto a dolor o humillación, por elección propia.

Ahora bien, el BDSM no es solo esto o estrictamente esto, se puede tener una práctica sin la otra, puedes disfrutar del bondage sin necesidad de ser una persona sumisa a los pies de su Dominante, puedes ser masoquista y disfrutar del dolor también sin entregarte en sumisión sino teniendo un compañero de juegos, incluso hay sumis@s que puede que no disfruten del bondage o de otras prácticas como la humillación y es ahí donde vienen los límites y distintos métodos para garantizar una seguridad, disfrute y desarrollo de esta actividad sin hacer daños psicológicos o físicos irreversibles. Hay muchas razones que nos diferencian de algún violador, asesino o persona con problemas psicológicos graves. 

Hablando de BDSM, hablamos también de crecimiento personal, desarrollo del intelecto, elegancia, pues es un mundo que requiere cierto tipo de información de sus participantes. No hablamos de sexo duro y ya, hablamos de una serie de prácticas, muchas de las cuales requieren cierto tipo de entrenamiento y educación para evitar accidentes graves, pues aquí se juega con sensaciones extremas y entrega de poder. Requiere mucha sinceridad por parte de los que están en el juego respecto a gustos, sensaciones y sentimientos, siempre para evitar que alguien salga dañado en estas actividades de placer. Debe haber incluso más compenetración y confianza que en una relación vainilla (convencional), esto de explorar los límites y gustos de cada quien, tener nuevas experiencias y una responsabilidad al momento de la dominación y entrega, ayuda a crecer, a liberarse e incluso a vencer complejos a cada persona.

Es tan amplio este mundo que puede o no involucrar sexo, ya que los participantes pueden obtener incluso más placer que el sexual, durante estas prácticas. También puede limitarse a sesiones de vez en cuando (sesiones es cuando las personas se encuentran para realizar estos juegos), puede ser algo más compenetrado como una relación D/s, donde la persona sumisa debe seguir ciertas reglas y órdenes que el Dominante quiera en el tiempo que ambos puedan pero con más frecuencia y hasta puede ser algo 24/7, es decir un juego de rol durante las 24 horas del día, 7 días a la semana, esto es por supuesto sin dejar a un lado la vida personal de cada quien para poder desenvolverse en la sociedad como una persona normal. De igual manera una relación de este tipo puede limitarse enteramente a el intercambio de poder y sus diferentes juegos, sin involucrar una relación a nivel sentimental de pareja como un noviazgo, es decir sin llevarlo al lado vainilla.

En la definición de las siglas del BDSM, hice énfasis en que siempre estas prácticas son por mutuo acuerdo, independientemente de las reglas a las que se lleguen después, esto es lo básico. La persona azotada siempre QUIERE ser azotada y la persona que azota QUIERE azotar, aquí nada es obligado ni con una persona obligada, si simplemente no lo deseas o no quieres, pues no lo hagas, antes de ser dueño de alguien o entregarte, tienes primero que ser dueño de ti mismo.

SSC


Estas siglas significan Sano, Seguro y Consensuado. Muchos lo llaman la trilogía del BDSM.
Debe ser sano, la entrega de la persona sumiso generalmente es entera, incluso mental, por esto la persona Dominante tiene una responsabilidad alta en no dañar psicológicamente a la persona que le confía todo su ser, esto incluye un daño físico grave.

Seguro pues en todas estas prácticas ya que son extremas  debe haber cierto rango de seguridad, por ejemplo, al hacer ataduras debe haber una tijera cerca para que en casos de emergencia se pueda soltar rápidamente al sumiso. Durante estas prácticas se debe evitar un estado de ebriedad o drogas que alteren la percepción tanto de la fuerza, dolor y demás sentidos que puedan poner en riesgo a sus participantes.

Consensuado, esto debe existir SIEMPRE como ya dije si tú no quieres no lo hagas, no se obliga de ninguna manera a los participantes a hacer nada. Se puede conversar sobre los límites de los participantes, que te gustaría experimentar, que has hecho, que no, cuáles son tus límites flexibles que podrías superar con ayuda y cuáles son tus límites intocables, infranqueables que por nada quieres hacer. Por supuesto los límites siempre pueden ir variando y ser cambiantes, como seres humanos que somos. A veces la entrega es tan completa y el Dominante conoce tan bien a su sumiso que este puede hacer que el sumiso supere límites o desee superarlos y es cuando la mano guía del Dominante interviene.

En el SSC se crea una palabra o palabras (también gestos en caso de no poder hablar) de seguridad, que le da al sumiso la capacidad de detener el juego que se esté llevando a cabo o disminuir la intensidad en caso de ser estrictamente necesario y que el sumiso sienta que está ocurriendo o puede ocurrir algo no tolerable por este.

Una vez estipulados los límites y la palabra de seguridad, la persona sumisa abandona todo tipo de poder en la relación y se lo cede a la persona Dominante que debe respetar los límites y la palabra, fuera de esto es quién tiene completo poder en la relación.

En muchos casos en el BDSM se pueden crear “Contratos” que obviamente no tienen un valor legal como tal pero da orden y seguridad a la relación. En estos contratos se suele colocar las responsabilidades de la persona sumisa, las responsabilidades de la persona Dominante, los límites de ambos, palabras de seguridad e incluso reglas de vestimenta, alimentación, si se involucra sexo o no, tareas diarias y demás cosas importantes para la persona Dominante y la sumisa.


RACSA


Estas siglas se refieren a Riesgo Asumido y Consensuado para prácticas de Sexualidad Alternativa o no convencionales. En inglés RACK por Risk Aware Consensual Kink.

Esta es una alternativa para los que no practican el SSC, nos habla de que los participantes en una relación que utiliza el RACSA, estipula de igual manera consensuada, que interpretan ellos como sano y seguro, aquí suele haber menos límites o incluso no lo existen. Si los participantes lo desean pueden realizar los juegos bajo el efecto del alcohol por ejemplo.

Aquí también se habla del metaconsenso, es decir, consensuar no consensuar, donde no se establecen límites ni palabra de seguridad, por supuesto esto requiere gran control por parte del Dominante y un profundo conocimiento de su sumiso, para saber hasta dónde y cómo llevar a su sumiso durante el juego sin resultar en una experiencia dañina o no satisfactoria para el sumiso. Pero esto debe ser hecho en relaciones que ya tienen tiempo y más experiencia, para evitar accidentes graves. De igual manera como veníamos diciendo el RACSA se aplica sólo si ambas partes están de acuerdo, reafirmo que nada es obligado.






Estas son algunas características que tiene una relación BDSM a mi parecer, como dije en un principio, estos conceptos e interpretaciones son personales y nadie tiene la absoluta verdad de nada, sobre todo en un mundo tan amplio y con tantas variaciones como este, mis opiniones no son completamente rígidas, pues pueden cambiar, pero esto es lo que pienso y entiendo hasta ahora, acepto críticas constructivas.
Más delante tocaré temas como lo que es una persona sumisa, una Dominante, una switch y una esclava. También hablaré más profundamente de parafilias, prácticas y fetiches en el BDSM, unas ya mencionadas y otras no. Espero haya sido informativa =)

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